Pintar paredes es una de las tareas de bricolaje con la que se atreven más «manitas» domésticos. No es de extrañar, ya que a los productos de pintura se dedica una mínima parte de un presupuesto de pintura, por lo que el «Hazlo tú mismo» sale muy rentable si sustituyes la mano de obra profesional por tu propio trabajo. Aunque es relativamente fácil tomarle el pulso a esta tarea, no es raro que se cometan algunos errores de bulto, que es conveniente evitar para un resultado impecable. Aquí te vamos a explicar 10 buenas prácticas para culminar con éxito tu proyecto de pintura.

Pintar paredes con productos de buena calidad

Elegir una buena pintura es una premisa básica a la hora de pintar paredes. Un buen consejo es comprar el mejor producto que pueda permitirse tu bolsillo. No te fijes solo en el color, sino en la calidad, que a menudo se ve reflejada en el precio. Las pinturas de baja calidad llevan menos pigmentos y van más diluidas, por lo que es necesario aplicar más capas, y al final, el ahorro previsto no es tal.

Si vas a pintar en color, evita comprar pintura blanca y añadir tintes, ya que no es fácil obtener el color exacto que deseas. Por el contrario, utiliza los sistemas tintométricos que tienen en las tiendas de pintura o, mejor aún, elige el color exacto que deseas de la carta de color de una marca de prestigio. Cualquiera de los que tenemos en nuestra tienda online de pinturas puede ofrecerte el nivel de calidad necesario, pero si eres muy exigente con el color, te recomendamos que explores las cartas de color de Farrow&Ball y Little Greene en nuestra tienda de pintura online, y pidas muestras previamente.

El mismo razonamiento es aplicable al resto de utensilios. Compra un rodillo y brochas para los sitios más inaccesibles de buena calidad. Al tiempo que haces tu pedido de pintura, puedes preguntarnos por los útiles más adecuados según la superficie que vayas a pintar (lisa o rugosa).

Calcular bien la cantidad de pintura 

Este aspecto es fundamental para no quedarte corto de pintura. Debes hacer el cálculo multiplicando la base de cada pared por su altura, y luego sumar todos los resultados. Después comprueba el rendimiento de la pintura elegida en las indicaciones del fabricante. Prevé también que son necesarias dos capas de pintura, salvo que sea monocapa y pintes sobre un color claro. Si es al revés (vas a pintar claro sobre oscuro), calcula dos capas en cualquier caso.

Añade a tu pedido siempre un 10 por ciento extra para retoques futuros. Si utilizas un bote de potitos de bebé de los que hacen «pop» al abrir, o bien un tarro de cristal con tapa de rosca, cuidando de poner un film plástico antes de la misma, y lo guardas bocabajo, la pintura te durará mucho tiempo.

Preparar las paredes correctamente

Tan importante como pintar es preparar previamente las paredes. Conviene eliminar el polvo con un cepillo envuelto en un trapo limpio y después revisar grietas y agujeros que vayas a tapar. Los agujeros los puedes rellenar con papel de periódico arrugado y apretado, y después echar masilla encima. Las grietas, conviene ahuecarlas ligeramente con la espátula, y luego rellenarlas también con masilla. Finalmente, comprueba el estado del paramento: elimina las zonas descascarilladas, y si hace mucho tiempo que no pintas, aplica una base, también llamada imprimación o selladora. Te llevará poco tiempo, pero te permitirá conseguir un acabado mucho más profesional.

Retirar interruptores y radiadores

No sucumbas a la tentación de taparlos simplemente y pintar por detrás o alrededor de los mismos. Si quieres unas paredes pintadas como si fuera un trabajo profesional, tómate el tiempo de retirar los interruptores y los radiadores y pintar debidamente por detrás. Quizá te convenga también cambiar estos antiguos rodapiés de madera por unos más anchos y en color blanco, que es como se llevan ahora. Aprovecha para hacerlo y pintar bien la pared hasta el suelo antes de colocar los nuevos.

Proteger suelos y muebles

No te vas a arrepentir del tiempo que dediques a la tarea de proteger bien los suelos y los muebles. Agrúpalos en el centro de la habitación y cúbrelos con plástico. El suelo, mejor con papel, para no ir resbalando con la pintura que pueda caer.

Batir (y batir) la pintura

Preparar la pintura con la dilución en agua que recomiende el fabricante y batirla correctamente (es decir, mucho) para que la fórmula se homgeneice (los pigmentos suelen depositarse en el fondo) es otra tarea fundamental antes de lanzarse rodillo en ristre a pintar las paredes. Bate con un palo de madera o metal o, mejor aún, pon un accesorio batidor a tu máquina de taladrar.

Aplicar la cantidad de pintura necesaria

Es otro capítulo en que suelen fallar los pintores espontáneos… Aplicar en cada pasada la cantidad necesaria, ni mucha ni poca pintura, es importante para que después no se noten marcas en la pared. Por un lado, hay que introducir ligeramente el rodillo en la bandeja de pintura (solo hasta la mitad, no sumergirlo por completo), y pasarlo de ida y vuelta por el escurridor.  Por otro lado, no hay que intentar estirar la pintura en cada pasada de rodillo sobre la pared. Es cierto que con la práctica se le toma el pulso la tarea, así es que te recomiendo que comiences por una zona poco visible de la habitación.

Quitar la cinta de pintor nada más terminar

La cinta de pintor puede parecer poco adherente, y lo es en los primeros instantes. Sin embargo, después se pega tanto que puede arrancar la pintura al tirar de ella. La recomendación es quitarla nada más terminar el trabajo y antes de que seque la pintura. No temas, que no vas a estropear el trabajo. Y luego no te tocará frotar sobre marcos de puertas y ventanas como si no hubiera mañana para eliminar el pegamento.

Pintar paredes con previsión de buen tiempo

La humedad en el ambiente dificulta el secado de la pintura. Por eso conviene que consultes el parte meteorológico antes de iniciar tu trabajo. No crees corrientes de aire al trabajar, pero ventila bien al pintar paredes. El buen tiempo ayuda a que la pintura seque antes y se fije bien. Por otro lado, las nuevas pinturas plásticas no tienen apenas olor, por lo que con una buena ventilación previa, puedes dormir en casa ese día sin problemas.

¿Has encontrado útiles estos consejos? ¿Necesitas comprar pintura online y un buen asesoramiento a cargo de expertos para hacer el pedido completo que necesitas? En Pinturas Sanguino estaremos encantados de atenderte, tanto si nos llamas por teléfono como si contactar con nosotros por correo electrónico o a través de nuestro formulario. ¿Hablamos?